Un ciervo perdido en el bósque. No lo pienso dos veces, ni necesito distraerme por el olor de alguien más. Mas al avalanzarme a él me doy cuenta de que quien esta cerca nuestro es Alice, y aterrizando en el lomo del animal, fracturandole unos huesos, lo incapacito para ella.
-Tiene sed, ma'am?